lunes, 22 de noviembre de 2010

¿Es esto lo que queremos?

Las goleadas del Barça al Almería y del Madrid al Athletic no han podido llegar en mejor momento. En pleno debate sobre el reparto de los ingresos televisivos, los dos grandes golean sin miramientos. Con violencia, exhibiendo todo su potencial, justo antes del clásico.

Como ocurre con la crisis económica en la que el mundo está inmerso, la solución parece pasar por cargarse a la clase media. Aquella que, al margen de los beneficios de los gigantes, da vida a la economía real, con las pequeñas empresas que dan trabajo a miles y miles de personas.

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jueves, 18 de noviembre de 2010

Resaca agridulce, derbi para remontar

La derrota del Villarreal frente al Barça deja un sabor agridulce. Si bien las sensaciones que dejaron los de Garrido son muy buenas, el hecho es que no se sumó ni un punto, y que el derbi valenciano del próximo fin de semana no deja lugar a los lamentos.

De puertas afuera, el Villarreal se ha ganado el respeto de sus competidores. Nadie más, seguramente en el mundo, puede jugar al Barça con sus mismos argumentos y complicarle la vida. Eso lo vio toda España, ya que el partido batió récords de audiencia. Los amarillos ‘gustan’ porque juegan bien y, hasta el momento, son los únicos capaces no ya de hacer sombra –imposible- sino de tutear a los dos grandes. El problema es que el buen cartel no da puntos, y hay que seguir sumando.

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lunes, 15 de noviembre de 2010

Preciado y el Barça-Villarreal

La rueda de prensa de Manolo Preciado fue espectacular. Le cantó las cuarenta a Mourinho como seguramente nunca nadie lo había hecho. De entre todo lo que le dijo, creo que hay una frase que a los medios les ha pasado un poco desapercibida pero que la gente que ha dedicado parte de su vida a hacer deporte entenderá que puede hacer más daño que ninguna otra: "Aquí, antes que nada, somos deportistas", le dijo a Mou.

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miércoles, 10 de noviembre de 2010

El problema de Villa

El problema de Villa no es ni de falta de acierto, ni de ansiedad. Tampoco su juego es peor. El problema del asturiano es que antes jugaba en el Valencia y ahora en el Barça, esto es, antes en los informativos veíamos sus goles y ahora lo vemos todo. Lo que marca y lo que falla.

lunes, 8 de noviembre de 2010

Una reflexión sobre Bale

Esta ha sido la semana de Gareth Bale. La semana de su segundo partidazo contra el Inter, de los cada vez más insistentes rumores de interés por el Madrid, de la noticia de que fue ofrecido a Txiki Begiristain para el Barça y el entonces secretario técnico lo rechazó.

Llegó el sábado y su Tottenham perdió estrepitosamente contra el Bolton por 4-2. Él estuvo correcto, sin destacar, tímido.

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viernes, 5 de noviembre de 2010

¿Entrenador nuevo, victoria segura?

Entrenador nuevo, victoria segura. Así reza uno de los tópicos futbolísticos que menos se cumplen. A ver como le va al Málaga en Cornellá. Curiosa trayectoria de los boquerones: han conseguido sus 7 puntos fuera. El Espanyol, se sabe, lo gana todo en casa. Ojo a: Álvaro Vázquez.

miércoles, 3 de noviembre de 2010

Arte o batalla

Hace dos años-ver aquí-escribí sobre el síndrome de Stendhal tras un partido de Champions del Barça. Afirmaba haberlo experimentado por el juego preciosista del equipo de Guardiola que, meses más tarde, sería tricampeón.

Algunas cosas han cambiado desde abril de 2009. Otras no. El Barça continúa queriendo desarrollar un juego atractivo, más cercano al arte que a la violencia. Extraño, puesto que en fútbol juegan dos. La consigna sigue siendo reducir al mínimo el componente riesgo teniendo la pelota el máximo tiempo posible. El Barça logra por momentos la virtud divina de hacer desaparecer al adversario.

Lo que pasa es que, entre unas cosas y otras, a los barcelonistas ahora les cuesta más, en algunos partidos, hacerse con ese control total con el que sorprendieron al mundo. Difícilmente Xavi e Iniesta coinciden en el centro del campo, lo que dificulta el dominio. Arriba cuesta más definir, posiblemente porque los continuos cambios de delantero hacen que sea difícil tener automatismos a principios de temporada.

Y, ya lo hemos dicho en este blog, los rivales no son estúpidos y buscan la manera de echar el guante al Barça. Unos lo consiguen -Rubin, Hércules, Copenhague- y otros no -el último ejemplo, el Sevilla-. Sin embargo, los partidos de los catalanes tienden a igualarse.

Y, aquí quería llegar, esto es beneficioso para el espectador. Ya no aportan nada los partidos decididos en el minuto 20 en dos o tres acciones brillantes de Messi, Xavi o Iniesta. Gente como yo preferimos que el Barça se tenga que reinventar porque los rivales se lo ponen difícil. Que lo que ve el espectador se acerque más a una batalla entre dos que al arte de mano alzada en un despacho solitario. Que el componente azar y/o riesgo vuelva. Que cuando marca el equipo de Guardiola, quien simpatice con él se levante de la silla y lo celebre efusivamente.

El fútbol se ha hecho grande porque da a la gente aquello que no tiene. La rutina de los días de trabajo la rompe la cerveza, el nerviosismo, la incertidumbre, el gol decisivo. Si el Barça da a sus espectadores lo mismo que el trabajo -rutina, de victoria plácida en goleada abrumadora-, qué aburrimiento.

Dicho esto, y teniendo la sensación de que el Barça apura más que el año pasado, el equipo está igual de vivo en todas las competiciones. Pedir continuidad después del triplete era una utopía. Hay que exigir valentía, ganas, implicación. Trabajo y buen juego, no inmunidad. Las victorias seguirán llegando si los futbolistas así lo entienden. Y nada hace presagiar lo contrario.